Se reúnen priistas de SLP
El que está al frente fue gobernador del estado por cuatro años (1994-1997).
Llegó a la titularidad del Poder Ejecutivo por ser el yerno incómodo.
Era del PRI, pero esposo (hasta la fecha, suponemos) de la única hija que tuvo Salvador Nava Martínez.
Y la foto es de las nostálgicas reuniones que de vez en vez siguen teniendo.
El resto de personajes integraron su gabinete de gobierno.
Un gobierno algo alocado, hay que decirlo.
Se recuerda cómo el protagónico Horacio llegó a ponerse, en su calidad de gobernador, en huelga de hambre junto a Said Lopez de Olmos.
Sí, el mismo Said que el gobernador actual tiene hoy en la cárcel por invadir tierras en San Vicente Tancuayalab.
Que tiempos de demagogia y falta de ley: Horacio en aquella fecha financió a Said, y lo aprovechó, para presionar a la Federación pidiendo más recursos.
Para ello, debemos pensar en el contexto.
Estaba en su apogeo el movimiento zapatista en Chiapas, y el gobierno federal para nada quería más levantamientos campesinos.
Volviendo a la foto de lo que ya se fue y dejó mal sabor de boca…
Vemos a su izquierda a lo que parece ser fue el policía del Estado, Miguel Naya Guerrero, quien al tiempo que fungía de jefe policial, regenteaba una empresa de seguridad privada acenturionada.
Atrás, de camisa media mamey, está Amado Vega, quien hizo comparsa con Sánchez desde el Congreso del Estado.
Y enseguida, a la derecha, el último sobreviviente de aquellos políticos: Jorge Daniel Hernández Delgadillo.
Jorge Daniel es hoy el segundo de abordo en el gobierno municipal capitalino de Enrique Galindo Ceballos.
Del resto quizá no haya mucho que decir. Todos, empezando por el gobernador de los cuatro años, fueron dignos representantes de lo que los nuevos políticos llaman la «herencia maldita».
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